Después de un análisis 3D del rostro, el relleno facial se realiza solo en las áreas en que son necesarias dándole importancia a la manutención de su tridimensionalidad y no apenas al tratamiento de las arrugas y surcos, que muchas veces son consecuencia de la disminución del volumen de los cojines de grasa facial y de la reabsorción ósea decurrente del proceso de envejecimiento cutáneo.
La recuperación de la perdida de volumen facial se puede realizar a través de la reposición de ese volumen con ácido hialuronico inyectable y son la solucion perfecta para lucir un rostro más joven y saludable